El aro anticonceptivo o nuvaring es un método anticonceptivo que está basado en la inserción de un pequeño anillo en la vagina. Este dispositivo contiene dos hormonas que impiden la maduración de los óvulos y, por tanto, la fecundación de los mismos por un espermatozoide.
El principio de funcionamiento es el mismo que el de las píldoras anticonceptivas, pero en este caso, la activación de las hormonas y su paso a la sangre se produce en cuanto el aro se pone en contacto con la vagina. La efectividad de este método es también similar a la de la píldora y se calcula que alcanza el 99% de protección.
Para saber cómo ponerlo solo es necesario seguir unas sencillas instrucciones. Los principios básicos de las mismas indican que, en un período de un mes, el anillo ha de estar introducido en la vagina durante tres semanas, pasadas las cuales es necesario extraerlo. Tras una semana de descanso, se vuelve a introducir de nuevo otro anillo en la vagina y se inicia así el proceso de protección que dura un mes.
Las ventajas de este método anticonceptivo radican en la facilidad de uso, en la comodidad, en la efectividad y en el precio que no suele superar los quince euros al mes.
Desde el punto de vista de los efectos secundarios, estos están asociados con la liberación de hormonas en la sangre. Estas pueden ocasionar serios problemas en las personas que tienen problemas de corazón, tensión alta y a las fumadoras. No obstante, lo más normal es que los efectos secundarios sean mínimos o inexistentes y que la mayor parte de las mujeres lo utilicen sin notar absolutamente nada.
En cualquier caso, la opción más recomendable es consultar con un médico el método anticonceptivo que se va a utilizar y acudir a él en el caso de que aparezca algún efecto extraño.
Valeria Rubio
Sexóloga con más de una década de experiencia con un enfoque empático y accesible. Combina su formación académica con una pasión genuina por ayudar a las mujeres a explorar y entender su sexualidad de manera saludable y positiva.