que-es-la-clamidiasis

La clamidiasis es una enfermedad de transmisión sexual que, a pesar de ser desconocida para muchas personas, tiene una gran incidencia entre la población mundial junto con el virus del papiloma humano ¿Quieres conocer los síntomas y el tratamiento de esta enfermedad?

Esta enfermedad surge por la expansión de la bacteria Chlamydia Trachomatis, la cual coloniza el cuerpo del individuo afectado generando una serie de complicaciones y síntomas en los órganos genitales de dichas personas. La mayor problemática surge debido a que su transmisión es sencilla de manera que hay que tomar una serie de precauciones para no transmitírsela a otras personas en caso de que se sospeche de estar infectado.

Los síntomas de la clamidiasis varían dependiendo de si la enfermedad afecta a hombre o mujeres. En el caso de los primeros los síntomas más habituales son las ganas frecuentes de orinar y el escozor al tratar de hacerlo; la inflamación en los testículos, el ardor en las vías urinarias y las secreciones anormales por el pene también son otros de los síntomas que se pueden observar frecuentemente en varones.

En mujeres, por otro lado, los síntomas se encuentran también relacionados con los órganos reproductores y son los siguientes: manchas o sangrados fuera de la menstruación, sensación de ardor en las vías urinarias, dolor en las relaciones sexuales (con posibilidad de sangrado durante o después de estas), ardor al orinar y flujo vaginal espeso (pus).

Debemos tener en cuenta que la clamidiasis también puede transmitirse por contagio anal en cuyo caso los síntomas serían dolor generalizado, secreciones anales o dolor al evacuar. Y, por supuesto, también puede transmitirse por vía bucal en cuyo caso el dolor se centrará en esta zona además de poder presentar llagas en la boca.

Con respecto al tratamiento, debemos tener en cuenta que es una afección que responde bien a los medicamentos pero estos deberán estar prescritos siempre por un facultativo. Habitualmente éste consiste en un ciclo de antibióticos que podrán ser ingeridos por vía bucal o incluso introducidos en los genitales (en el caso de las mujeres) dependiendo de lo que mejor se adapte a cada caso.

En cualquier caso es importante que el ciclo de tratamiento se complete correctamente y también resulta indispensable contactar con las personas que hayamos tenido relaciones sexuales y usar protección en caso de querer mantener relaciones sexuales mientras se lleva a cabo el tratamiento.

Valeria Rubio

Sexóloga con más de una década de experiencia con un enfoque empático y accesible. Combina su formación académica con una pasión genuina por ayudar a las mujeres a explorar y entender su sexualidad de manera saludable y positiva.

Categorizado en:

Ginecología,

Etiquetado en: