Vientre plano

Conseguir un vientre plano es el objetivo del 90% de las mujeres, sobre todo ahora que se acerca el verano y hay que lucir palmito. Pero para conseguir un vientre plano, lo primero es preguntarse por qué no lo tenemos…¡hay montones de hábitos con los que podemos estar saboteando nuestro objetivo!

También debemos preguntarmos de dónde partimos, no es lo mismo una persona con sobrepeso, que necesitará mucho ejercicio anaeróbico para bajar la barriga, que otra delgada con michelines, que quizá pueda conseguir definir su cintura haciendo unos pocos ejercicios para vientre plano.

¡En todo caso, aquí dejo un plan infalible para conseguir un vientre plano!

La alimentación es un pilar fundamental para conseguir un vientre plano. En el caso de sobrepeso, una dieta baja en calorías es fundamental, pues es la única manera de deshacerte de la grasa que sobra en la zona de la barriga (y en el resto del cuerpo). Si estás en tu peso, no hace falta seguir una dieta, pero sí tener en cuenta que ciertos alimentos te hinchan e impiden que tu vientre esté plano. Evita alimentos precocinados, fritos y alimentos con muchas grasas. Seguir una alimentación a base de frutas y verduras debe ser algo que uno hace por salud y no por estética, pero en todo caso, respetar las cinco raciones de frutas y verduras te ayudará a conseguir un vientre plano.

En cuanto al ejercicio, y frente a lo que puedas creer, lo más eficaz para conseguir un vientre plano es el ejercicio anaeróbico. Correr es un ejercicio súper completo: te permitirá perder grasa y a la vez definir la zona del vientre. Nadar, andar en bicicleta o trotar, también resulta muy beneficioso (aunque no tanto como correr).

Eso sí, podemos completar el ejercicio anaeróbico con ejercicios abdominales, para  fortalecer los músculos y también a acelerar el metabolismo (cuanto más músculo tenemos, más calorías consume nuestro cuerpo). Opta por combinar ejercicios para abdominales superiores, inferiores  y oblicuos…¡así conseguirás más fácilmente definir  tu vientre plano!

Algo que se suele olvidar a la hora de conseguir un vientre plano es la importancia de la postura corporal. Si no caminas recta, es muy probable que con los años la barriga acabe abombado hacia delante, incluso si no te sobra grasa. ¡Trata de corregir tu postura!

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